El cine francés junta a sus ídolos en una película y crea espectáculo. Ocurrió cuando en 1970 Alain Delon (1935) y Jean Paul Belmondo (1933-2021) se vieron las caras por primera vez en Borsalino, un intento de repetir el éxito americano de Robert Redford (1936) y Paul Newman (1925-2008) un año antes con Dos hombres y un destino (Butch Cassidy and the Sundance Kid).
Pero primero fueron ellas. Jeanne Moreau (1928-2017) y Brigitte Bardot (1934), las dos divas del cine francés montaron un buen espectáculo cuando unieron fuerzas en ¡Viva María! (1965), un western en clave de humor que escribieron Louis Malle (1932-1995) y Jean -Claude Carrière (1931-2021).
Ambientada a principios del siglo XX, Bardot y Moreau se llaman las dos Maria, se conocen en Centroamérica, se hacen amigas, forman pareja artística en una compañía de variedades que va de pueblo en pueblo con sus carromatos y de paso, como quien no quiere la cosa, se involucran en la revolución.
Louis Malle tenía suficiente con las dos estrellas para montar su comedia de acción paródica, pero quiso más cuando llamó a Alain Delon para que interpretara al Sr. Flores, un guerrillero que se une a las chicas y estas heredan su causa. Pero el actor abandonó el barco poco antes de comenzar el rodaje y entonces entró el norteamericano George Hamilton (1939). Salió perdiendo, porque se quedó con uno de los peores actores de la historia del cine.
“Aún después de tres días muerto serías mejor actor que ese baboso”, le dice Maurice Kruger (Edward G. Robinson) a Jack Andrus (Kirk Douglas) en Dos semanas en otra ciudad (Two Weeks in Another Town) (1962). “Ese baboso” es Davie Drew y lo interpreta George Hamilton. Lo mejor es que este galán y playboy internacional siempre ha sido muy consciente de sus limitaciones y de su poco talento para la interpretación, pero poco le ha importado porque tiene mucho morro: «seré recordado como un actor de tercera fila, cuando en realidad soy un estafador de primera clase».
En 1971 llegarían Las petroleras (Les pétroleuses), o Brigitte Bardot y Claudia Cardinale (1938) en España en un western y enfrentadas por un rancho. Pero no fue lo mismo.
¡Viva Maria! se puede ver en Filmin
